Buhardillas infantiles

No hay un espacio más encantador en una casa que la buhardilla. Evidentemente no todos los hogares tienen el lujo de contar con ella, pero si es vuestro caso, no sabéis la suerte que tenéis.

Una buhardilla es un lugar mágico que muchas veces queda relegado a trastero. Por norma general son amplios y cuentan con muchísima luz. ¿Por qué no aprovechar toda esa luz para crear una habitación infantil?

Nuestros hijos se sentirán realmente cómodos aquí, pues podemos, además de colocar varias camas (en el caso de que sean más de uno), crear una gran zona de juegos.

Lo primero que tendremos que hacer es conseguir crear un espacio bien climatizado, con un aislamiento bueno y aprovechar toda esa luz que nos puede ofrecer. Si ya tenemos ventanas suficientes, genial, si no tenemos quizá deberíamos hacer más.

En el punto de las ventanas hay algo muy interesante. Si están colocadas en el techo (no todas las buhardillas las tienen ahí), podemos aprovechar para colocar la cama debajo de ellas. De esta forma, nuestros hijos podrán ver el cielo por la noche, durmiéndose mientras observan las estrellas.

Si no contamos con esas ventanas en el techo, o las mismas se encuentran justo en el centro de la habitación, quizá sea mejor opción usar una de las paredes e intentar que los pies de la cama coincidan con el lado decreciente, de esta forma se aprovecha muchísimo más el espacio, y el niño no tendrá problemas al levantarse de la cama y darse con el techo.

El resto de la habitación-buhardilla será una amplia zona de juegos. La parte más baja puede ser empleada para poner arcones, en los que los niños puedan guardar sus juguetes. Esto es ideal, pues así, la zona con techo más alto será el espacio en el que ellos se moverán para jugar.

En cuanto a la decoración, os proponemos pintar las paredes de esa habitación con colores alegres capaces de captar toda la luz. Así conseguiremos una estancia dinámica, llena de vida, como nuestros hijos.

Fotos vía: micasaonademuñecas, rawr, decoideas,